MESA REDONDA Emociones positivas

JAVIER MARTÍNEZ, ESCULTOR

En la mesa redonda de las emociones negativas se usó una clasificación donde solo había una emoción positiva, la alegría. Resulta insuficiente puesto que hay más emociones positivas además de la alegría como el amor. Casi todas las representaciones de la prehistoria buscan dejar una impresión frente a la muerte.

Las manos impresas en cuevas buscan dar testimonio de aquellos que estaban allí. Afirmar su existencia. Se tiene evidencia de que en el Egipto faraónico y la Grecia Antigua ya se realizaba moldes del cuerpo humano. Se cree que fue una cuestión de pragmatismo puesto que así el sujeto retratado no necesitaba posar. En Roma convertían el miedo a la muerte en esperanza y en respeto por sus antepasados. Las máscaras mortuorias eran casi una obra catártica. Cuando fallecía un ser querido, cuando se trataba de una persona que había tenido éxito en la vida. La cara se hacía con un molde y el cuerpo con madera, y paja. Se colocaban en un altar de imágenes maiorum para honrar a los antepasados.

NUEVO RITUAL CATÁRTICO Se realizaban moldes de una parte afectada del cuerpo para pedir a los Dioses, y luego a Dios o la Virgen que curasen su enfermedad. También se usaban para agradecer haber sobrevivido un atentado, un accidente, etc. Esto se ve especialmente en Italia. Se tiene constancia de hasta 800 imágenes en una misma iglesia. Más tarde, algunos escultores usaron los moldes para realizar esculturas de grandes personalidades de la época como los Sforza.

AUGUSTE CLÉSINGER, ESCULTOR DEL SIGLO XIX En aquella época estaba muy mal visto usar moldes, se consideraba como una trampa en la escultórica. Se consideraba que no tenía ningún mérito. Como estaba tan mal visto, el artista tenía que defenderse aportando pruebas. En el caso de la escultura de Clésinger, cuando expuso la escultura en la exposición todos le acusaron de haber usado moldes. La modelo de su obra era una prostituta que había sido la amante del escultor y entonces era amante del principal acusador. Él había sacado detalles íntimos de la modelo, pero nadie se atrevió a decir nada cuando les pidió que explicasen por qué era un vaciado por no admitir que conocían también esos detalles.

En el arte moderno encontramos ejemplos como Marcel Duchamp, que realizaba moldes de las partes íntimas de sus parejas. Hacia el final de su vida, dijo que abandonaba el mundo del arte para dedicarse al ajedrez. En realidad realizó su última obra y ordenó que solo se montase después de su muerte. Se trata de una puerta y a través del cerrojo se puede observar una escena. En ella hay un cuerpo de mujer desnuda que está formado por moldes de partes del cuerpo de las distintas parejas de Duchamp.

ISABEL QUINTANA, CURADORA

Los límites de la representación del dolor. Parece que está relacionado con una responsabilidad ética. ¿Qué consecuencias puede tener? El tratamiento sensacionalista del dolor. En el ámbito del derecho se usa la coartada del artista cuando se ha acusado a algún artista.

Vivimos en un mundo saturado de imágenes violentas, asistimos a ejecuciones en directo, atentados, etc. Pero la representación del dolor, de la muerte violenta no son algo nuevo. ¿Qué ocurre con las condenas? Era un tema muy popular en la decoración de las grandes casas pues servía como advertencia ante la soberbia.

Cuando el horror no es real nos puede conmover, pero cuando es real, además, produce vergüenza. Por ejemplo, “Las Pinturas Negras” de Goya que representaban los abusos de las tropas francesas durante la ocupación napoleónica. El tema de las autopsias también es común en el mundo de la historia del arte.

FOTOGRAFÍA DE GUERRA

Alexander Gardner y Timothy O’Sullivan, obtienen permiso para fotografiar la guerra. No solo fotografían las trincheras, sino los cadáveres amontonados. Ellos se defendieron diciendo que querían concienciar a la gente de los horrores de la guerra y que no se repitiese nunca más. Se les criticó diciendo que al poner esas fotos en el periódico lo que estaban haciendo era dejar cadáveres en las puertas de las casas de los americanos.

ESTETIZAR EL SUFRIMIENTO

Sebastiao Salgado y Susan Sontag cuestionan embellecer el dolor. ¿Qué sentido tiene embellecer y qué tan autentico es ese dolor? TERESA MARGOLLES Realiza lienzos impregnados en sangre de asesinados en enfrentamientos entre policías y narcotraficantes. Además, se fregaba con sangre el suelo de la sala. Quería concienciar sobre los asesinatos por drogas en México. ¿Cómo obtiene ella la sangre? Supuestamente recoge la sangre cuando se produce el delito. Al tocar un cadáver, está obstruyendo la investigación. Además, hay leyes sobre el transporte de órganos y todo tipo de tejidos humanos. En la misma línea que el artista Damian Hirst y sus obras con gran valor económico, Teresa Margolles, tiene una obra que consiste en la lengua de un asesinado en México con un piercing. La artista adquirió la lengua pagando a la madre del fallecido para que pudiese comprarle un ataúd.

ART. 20 CE, LIBERTAD DE EXPRESIÓN

Reconoce unos límites en el derecho al honor, la privacidad, la propia imagen, protección de la juventud e infancia. Hay límites más interiorizados como no fotografiar personas sin su permiso. El arte se queda dentro del sistema del arte, es decir, que el espectador no comprende o no está receptivo. La cámara como “ojo de la historia”. El problema es que al final tan solo recordamos las fotografías y no se recuerde mediante ellas. ¿Son las imágenes suficientes para concienciar? Cuando se presenta un problema global, la reacción es siempre la de sentirse sobrepasado, como que no se puede hacer nada al respecto. Además, contemplar esas imágenes no nos hace “mejores”. No siempre es necesario ver el horror de manera gráfica para captarlo. Por ejemplo, una fotografía de un marco roto con la foto de unas niñas fallecidas.

VICENTE ALEMANY

REPRESENTACIÓN DE LAS PASIONES EN EL ARTE CONTEMPORÁNEO

Consejos para investigar:

1) Cita de Umberto Eco “Las cosas que se deben hacer a la hora de empezar son las que los autores hacen al final”.

2) Tratar un clásico como si fuese moderno y algo moderno como su fuese un clásico.

El origen de la representación de la pasión. En la Edad Media surge uno de los principales mitos, el de la Santa Faz, La Verónica. Una mujer piadosa observa la pasión de Jesucristo. Esta mujer piadosa le da a Jesús un paño para que pueda taparse o limpiarse y este lo usa para limpiarse las lágrimas.

Las ilustraciones de los ceños fruncidos de Lebrun se asemejan a los pliegues de las telas en obras barrocas como las de Bernini. El éxtasis de Santa Teresa, en esta obra, hasta la piedra parece gozar.

PILAR PÉREZ, PERFORMANCE

Vamos a observar la posibilidad de transformación de las emociones de negativo a positivo. Cuando no canalizamos las emociones, cuando no las expresamos, no se produce esta evolución. Lo verdaderamente negativo en términos de emociones es no tenerlas: por ejemplo, los sociópatas y los psicópatas que no sienten ni miedo, ni amor y su vida emocional se encuentra situada en un registro muy limitado, entre la rabia y la excitación. Entre la gente que no siente el amplio crisol de emociones, no todos son asesinos, sino que están integrados en la sociedad. Y muchas veces, con la pérdida de valores conspiramos ante su maldad, contribuyendo a que produzcan mucho dolor en los grupos familiares, en las empresas y las escuelas (bulling, mobbing). Estas personas, si son artistas, abusan del dolor ajeno sin ninguna conciencia, y podrían estar entre los casos retratados por nuestra compañera jurista. Aprovechando la supuesta carta blanca de ser artista para producir estética sin ninguna ética. Está en nuestras manos y es nuestro deber identificarlo. La leyes también buscan proteger, pero las leyes de por sí, no dan conciencia.

Cuando no conseguimos expresar las emociones más densas o también las más positivas, algo se bloquea en nosotros. Por ejemplo, cuando alguien siente una alegría intensa, pero otra persona lo rechaza, esa alegría que no pudo ser expresada puede hacernos daño. Pero tenemos la capacidad de escucharnos a nosotros mismos y aprender de estos procesos. Trabajar con nuestros síntomas como si fuesen imágenes o mensajes de los sueños. Tratar de forma onírica las alertas de nuestro cuerpo como aconseja el terapeuta Arnold Mindell. Esta canalización positiva se estudia entre los teórico-prácticos de la bioemoción, Christian, Flechè, Paco Vinagre, Enric Corberá.

El arte como canalizador y catártico nos puede librar a nosotros, y a nuestro entorno de muchísimo mal. Pilar Pérez juega con una pieza de charcutería escayolada que se originó en un sueño. Ella estaba incubando su intervención para nuestro evento y supo que ese sueño tenía que ver con el cuerpo y las emociones. Tuvo la impresión de que la chacinería debía ser un salchichón (su fiambre favorito), pero con una forma más orgánica y no recto, ni demasiado grande, un salchichon corriente, no biológico, de un cerdo común que habría tenido una vida difícil, no uno biológico. Se informó en un centro de salud, en farmacias (una de ortopedias) y con tutoriales, de cómo escayolar un miembro humano. Y al enyesar el embutido percibió más fuertemente que recordaba a un falo, una conciencia vívida en ese momento, no mental. Y sí, operó escayolando algo sin hueso y por lo tanto con un contenido contrafactual, contra la lógica del pensamiento diurno, y siguiendo el sistema que utilizan los sueños (Eugene Gendlin).

Se preguntó si tenía que ver con algún recurso psicoanalítico clásico, falo- poder, ley del padre. Igualmente conectó con sus fobias en relación a la fragilidad física y temores por posibles accidentes en las extremidades. También se dio cuenta de que a la escayola había que darle amor, significado en esos mensajes que generalmente se colocan en las piezas escayoladas de los accidentados. Se ancló el embutido escayolado con un pequeño candado a la cintura y solicitó a los participantes en el evento una palabra, un signo de cariño en la escayola. Finalmente, como en algunas culturas que se comen al fallecido para integrar su fuerza y memoria en ellos mismos, propuso comernos el salchichón entre todos para entrar en comunión con él, y ser así uno y el mismo. Alquimia terminada.

EMOCIONES POSITIVAS

Fotografía: Jorge Perona

Fotografía: Javier Cuevas

Fotografía: Alejandra Pérez